martes, 29 de diciembre de 2015

EL SANTO CURA DE ARS

Hoy quiero hablarles de un Santo inmenso que significa muchísimo para mí y al cual le debo mucho.
 
San Juan María Bautista Vianney, más conocido como el Santo Cura de Ars, una personalidad que me ha conquistado espiritualmente, humanamente y que me inspira la mayor ternura y admiración. No puede ser de otro modo porque me emociona hasta lo más profundo este sacerdote que lo dio todo por sus feligreses y la salvación de las almas.

San Juan María Vianney, Santo Cura de Ars
Foto: Google


Conocí la figura del Santo Cura, gracias al autor José María Zavala, del cual he hablado en otra de mis notas. Él siempre lo mencionaba en sus libros religiosos, y ello motivó mi curiosidad. Consultando posibles obras sobre la figura de este santo, me surgieron muchas dudas sobre qué título elegir, por eso pedí consejo a José María, que con su habitual amabilidad, no dudó en recomendarme la biografía del santo escrita magistralmente por Monseñor Francis Trochu (Ediciones Palabra, colección Arcaduz). Afirmo con rotundidad que es la mejor biografía que he leído hasta el momento. Me parece esencial conocer la personalidad del protagonista, la época en que vivió, el ambiente familiar en el que se crio, para de esta manera tener una visión de conjunto, comprender cómo era y por qué pronunciaba unos sermones tan contundentes. Esta biografía cumple a la perfección con esa misión de dar a conocer al personaje en todos sus ámbitos.


Portada de la biografía escrita por Monseñor Francis Trochu.
Foto: Google

Nacido en el pueblo francés de Dardilly, el 8 de mayo de 1786, en la terrible Francia revolucionaria, Juan María destacó desde su más tierna infancia por su devoción tierna y profunda hacia Nuestro Señor y la Santísima Virgen. Criado en un hogar profundamente cristiano en el que cada día se ejercía la caridad,  y con una piadosa madre que le inculcó la devoción desde el primer minuto de su nacimiento, Juan María estaba destinado a la santidad. Su Primera Comunión fue celebrada clandestinamente junto a otros niños debido a la persecución que la Iglesia Católica y sus fieles sufrieron en aquella época.
 
Desde su infancia colaboró en las tareas agrícolas de la granja familiar y ahí labró su personalidad, preparándose para su futura gran austeridad. Fue siempre un ejemplo para sus hermanos y todos sus compañeros, y jamás sucumbió ante las burlas de estos últimos, incapaces de profesar su profunda devoción.

A la edad de 19 años inicia su formación para convertirse en sacerdote, lo cual le supuso numerosas dificultades puesto que ni siquiera había completado sus estudios primarios, y la gramática latina se le resistía con todas sus fuerzas. Pero ello no impidió que lograra su objetivo puesto que, como él mismo decía: "Los que son conducidos por el Espíritu Santo tienen ideas exactas. Ved por qué hay tantos ignorantes que ven más lejos que los sabios."

Llamado a filas para incorporarse a las tropas napoleónicas que se dirigían a España, empujado por las circunstancias, se convirtió en desertor y, tras diversas aventuras, pudo proseguir su formación para el sacerdocio, con multitud de sinsabores, concluyendo con su Ordenación Sacerdotal a la edad de 29 años.

Tras su paso por la parroquia de Ecully en la cual comenzó a desarrollar su ministerio sacerdotal, fue destinado a la pequeña aldea de Ars.

Camino de Ars, y para evitar extraviarse en un día de niebla, el reverendo se dirigió a unos niños que cuidaban sus ovejas. Fue el pequeño Antoine Grive quien le señaló el camino, y fue entonces cuando el sacerdote se lo agradeció con esta frase: "Amiguito, tú me has mostrado el camino de Ars; yo te mostraré el camino del Cielo."

Monumento del Santo Cura de Ars junto al pequeño Antoine Grive, que se encuentra a 1 km. de Ars.
Foto: Google


Así llegó el sacerdote Vianney a una parroquia en plena decadencia a todos los niveles. Salvo ciertas excepciones, habitaban allí gentes que blasfemaban, padres de familia que malgastaban su dinero en la taberna entregándose al vicio de la bebida, bailes por doquier, dejadez en la práctica religiosa, carencia de formación elemental y religiosa en los niños...Ante semejante panorama, el sacerdote puso manos a la obra, predicando con el ejemplo, exigió a los demás con el mismo rigor que se imponía a sí mismo, y consiguió finalmente que sus ovejas volviesen al redil. Los medios que utilizó para ello fueron: ayuno riguroso, penitencia constante, mortificaciones a las que se sometía, acción decidida y predicación vibrante y directa..."¡Dios mío, decía, concededme la conversión de mi parroquia; consiento en sufrir cuanto queráis durante toda mi vida...sí, durante cien años los dolores más vivos, con tal que se conviertan!" Así oraba durante las noches en vela, haciendo penitencia e implorando por los pobres pecadores.




 
 
El dormitorio del Santo Cura de Ars, tal como se conserva hoy en día.
En el centro, la mesa en la que escribió sus sermones durante interminables horas.
Fotos: Google.


Y así, durante décadas, se mantuvo firme en su labor pastoral, soportando incluso los embates del demonio, el "bellaco" como él lo denominaba. Todo su esfuerzo se vio recompensado con la conversión de sus feligreses, covirtiendo a Ars en un enclave que irradiaba santidad. Su fama se extendió y motivó que personas de diversas procedencias peregrinaran a Ars en busca del Santo Cura, bien fuera por mera curiosidad, bien buscando a ese sacerdote capaz de conseguir numerosas conversiones, bien para pedirle consejo debido a su don de discernimiento. Las colas ante su confesionario duraban días y días. El Papa Juan Pablo II hablaba así del Santo Cura:

"Desde mis años del seminario, había quedado impresionado por la figura del Cura de Ars, sobre todo, por la lectura de su biografía, escrita por Monseñor Trochu. Me impresionaba profundamente, en particular su heroico servicio en el confesionario. Este humilde sacerdote que confesaba más de diez horas al día comiendo poco y dedicando al descanso apenas unas horas, había logrado, en un difícil periodo histórico, provocar una especie de revolución espiritual en Francia y fuera de ella. Millares de personas pasaban por Ars y se arrodillaban en su confesonario."
 
Su caridad y su preocupación por el prójimo le impulsaron a crear La Providencia, una institución dedicada a la educación de niñas desamparadas. Jamás se consideró digno del mínimo reconocimiento, ni siquiera la concesión de la Legión de Honor francesa fue capaz de lo contrario. Es más, supo sobrellevar con resignación y humildad las numerosas calumnias proferidas por parroquianos y sacerdotes de localidades vecinas. El tiempo supo poner a cada quien en su lugar y la fama de santidad de Juan María Vianney se extendió por todo el país.
 
Sus intentos de retirarse en soledad y abandonar su labor parroquial no tuvieron éxito. Fue así como nuestro Santo Cura llegó al día en que su alma partió al Cielo, el 4 de agosto de 1859. Su cuerpo incorrupto se conserva en el santuario de Ars, al que dedicó toda su vida.
 
Vista de Ars y su basílica.
 
Detalle de unos de los frescos que decoran la basílica.
El Santo Cura bendice a los niños.
Pintura de Paul Borel.
Imagen: Google
 
El cuerpo incorrupto de San Juan María conservado en el interior del santuario.
Fotos: Google
 
Monumento al Santo Cura de Ars en Lourdes.
Foto: María Luz
 
Proclamado venerable y posteriormente beatificado, fue finalmente canonizado por el Papa Pío XI, y se ha convertido en el Santo patrono de todos los sacerdotes.
 
Junto a su biografía, resulta imprescindible la lectura de sus sermones.  Recopilados en tres libros, los recibí como regalo en el día de mi cumpleaños. No podía desear nada mejor. Es maravillosa la rotundidad con que San Juan María Vianney se manifiesta a través de todos ellos.
 
"Sermones escogidos" - Editorial Apostolado Mariano
Foto: María Luz
 
 
Por desgracia, no se conservan los sermones del Santo Cura en su totalidad, unos se perdieron, otros fueron destruidos, pero sí se conserva una buena selección de los mismos. En todo caso, son más que suficientes para que podamos leerlos y aprovechar sus enseñanzas, que constituyen el camino más recto y perfecto para alcanzar la salvación.
 
  
 

miércoles, 16 de diciembre de 2015

REFLEXION DEL DIA


"Todos los días, la Providencia nos ofrece flashes para que abandonemos las cosas del mundo y nos situemos en la perspectiva del Cielo, que es la única verdadera y válida...Vendrán cosas terribles, por eso, tenemos que estar preparados para no dejarnos engañar por falsos profetas." 

 (Rvdo. D. Pedro Paulo)
 
 
 
 

viernes, 11 de diciembre de 2015

IN PARADISUM

Si ayer compartía en este blog una de mis piezas musicales favoritas, hoy quiero ofrecer una pieza muy cortita pero muy hermosa, un réquiem cantado en latín por Sarah Brightman, la misma cantante que mencioné en la nota anterior.

Espero que os guste.
 
 
 
 
IN PARADISUM
 
Requiem aeternam dona eis.
Domine et lux perpetua.
Requiem aeternam, aternam dona eis,
perpetua luceat (eis).
In  Paradisum,
Christe eleison.
 
Dona eis requiem sempiternam.
In Paradisum,
Christe eleison.
In Paradisum.
 
 
 

jueves, 10 de diciembre de 2015

El AVE MARIA DE SANTA HILDEGARDA DE BINGEN

Adoro la música sacra, pocas cosas son capaces de elevar más mi espíritu. Desde hace tres semanas no deja de resonar en mi mente y en mis oídos la melodía de una bellísima pieza de música sacro-medieval, el Ave María compuesto por Santa Hildegarda de Bingen, que en pleno siglo XII, fue una de las mujeres más influyentes de la Baja Edad Media.

Abadesa, profetisa, conocedora de todo tipo de remedios curativos, Santa Hildegarda fue también compositora de piezas tan hermosas como la que hoy quiero compartir, y que sin duda se ha convertido en una mis favoritas.


 
 
Santa Hildegarda de Bingen
Imagen: Google
 
LETRA ORIGINAL DE LA COMPOSICION DE SANTA HILDEGARDA:
 

AVE MARIA, O AUCTRIX VITE

 
Ave Maria
                                                      o auxtrix vite
                                               reedificando salutem,

que mortem conturbasti

et serpentem contristi,
ad quem se eva erexit,
erecta cervice cum sufflatu superbie.

Hunc conculcasti
dum de celo Filim Dei genuisti
quem inspiravit Spiritus Dei.

O dulcissima atque amantissima Mater,
Salve,
que natum tuum de celo
missum mundo edidisti
Quem inspiravit Spiritus Dei.

Gloira Patri et Filio et Spiritui sancto.
Quem inspiravit Spiritus Dei

 
Y para que tan hermosa pieza musical no caiga en el olvido, la cantante y soprano Sarah Brightman ha llevado a su último disco una adaptación muy hermosa, que espero os guste tanto como a mí. Puede esucharse en este enlace.
 
 
AVE MARIA
 
Ave Maria reedificando
Ave Maria Spiritus Dei
Ave Maria reedificando
 
Spiritus Dei
Spiritus Dei
 
O dulcissima atque amantissima
atque amantissima
Amantissima
Amantissima
 
Ave Maria
Ave Maria
 
Spiritus Dei
 
  
 

JOSE MARÍA ZAVALA

Toca hoy el turno de hablar de JOSE MARIA ZAVALA, un gran autor, historiador e investigador,al cual me siento muy honrada de conocer y cuyos libros se encuentran en un lugar preferente en mi biblioteca, dedicados de su puño y letra.
 
No hace falta que os hable mucho de él, todos conocéis sus numerosas obras dedicadas a la guerra civil española y a la dinastía de los Borbones escritas por este digno sucesor de Juan Balansó.
 
Si lo traigo a este mi humilde blog, no es por sus excelentes obras históricas sino por sus libros de vertiente religiosa, que con tanto cariño y dedicación han sido escritos por él a raíz de su conversión y que me consta han ayudado a tantas personas en su reencuentro con la fe.
 
 
José María Zavala sostiene en sus manos su libro dedicado a San Pio de Pietrelcina.
Foto: larazon.es
 
 
 
A destacar en primer lugar su precioso libro "PADRE PIO" dedicado a la figura de San Pío de Pietrelcina, el santo de los estigmas. Un recorrido por su vida y milagros, y cuando digo sus milagros me refiero tanto a los que hizo en vida como a los que sigue haciendo cada día. Tal como él dijo: "Daré más guerra muerto que vivo."
 
 
 
 
 
Fruto de una exhaustiva investigación fue su siguiente obra, "LAS APARICIONES DE EL ESCORIAL", dedicado a las apariciones de la Virgen en Prado Nuevo, sucesos extraordinarios que siguen en estudio por parte de la Iglesia.
 
 
 
 
Si bien estas dos obras mencionadas son de muy recomendable lectura por su interés, me permito aconsejar, muy especialmente, la lectura de "ASI SE VENCE AL DEMONIO", que cuenta con la  colaboración del Padre Salvador Hernández. En el mismo se aborda el delicado tema de las posesiones diabólicas, ofreciendo testimonios de exorcistas y poseídos. 
 
 
 
Debo reconocer que este libro me marcó, y que para mí, hay un antes y un después de su lectura. No me canso de recomendarlo aunque sé que la mayoría de personas no se anima a leerlo porque no quieren oír hablar de este tema, les produce temor, sin embargo es necesario conocer todo lo que relata porque hoy en día la sociedad se ve inmersa en cuestiones peligrosas, de las que muchos no son conscientes. A destacar especialmente la parte dedicada a la música satánica. Es mucho mejor conocer la verdad, por muy dura que sea, para aprender a protegernos frente al mal. Es un libro de gran ayuda y  debería ser de obligada lectura. Tuve la fortuna de acudir a la presentación de dicho libro,que contó con la presencia del autor y del Padre Salvador, y tuvo lugar en la Parroquia del Buen Suceso. Podéis asistir a la misma a través de este video.
 
 
 
 
 
 
Otra de mis obras favoritas es "ISABEL INTIMA", dedicada a la que, sin duda ha sido nuestra mejor monarca. Un libro muy especial para mí, porque conjuga el aspecto de la fe y la Historia, mis dos temas favoritos, y porque está dedicado a mi reina favorita de todos los tiempos. Para su elaboración, José María Zavala tuvo el privilegio de acceder  a los documentos de la Positio en su proceso de beatificación. En el libro se ofrece un retrato fiel de la personalidad de la reina, su profunda fe en Dios, sus numerosas virtudes y se aborda el tema de las controvertidas decisiones que se vio obligada a tomar y las razones que la llevaron a ello.
 
 
 
 
El último libro al que quiero referirme se titula "UN JUEGO DE AMOR", en el que José María comparte la autoría con su encantadora esposa Paloma. El libro tiene un inmenso valor, porque ambos han sido muy valientes  al desnudar sus almas y contarnos sus vidas, sus experiencias pasadas, en lo que ha sido un verdadero camino lleno de espinas y dolor, dando gracias a Dios y a la intercesión del Padre Pío en sus caminos de conversión. Una obra indispensable en la sociedad actual que, sin duda, prestará ayuda a muchas personas que se encuentran en situaciones matrimoniales difíciles. Leyendo esta obra descubrirán  la importancia y significado de ese sacramento matrimonial.
 
José María Zavala y su esposa Paloma en la imagen de portada.
 
  
Espero que estas obras, escritas por una auténtica "pluma del Espíritu Santo", os sirvan de ayuda en vuestras vidas. Estoy segura de que su lectura os servirá de provecho.